Datos técnicos temporada 1984
Inmersos en la era del turbo ( Nelson Piquet primer campeón mundial turboalimentado en 1983 con el Brabham-BMW) la temporada de 1984 se presentaba compleja y animada. La FIA había introducido reformas en el reglamento que afectaban sobre todo al tema de los carburantes
Motor: Los motores de 3000 c.c. atmosféricos que montaba Ford Cosworth, serían retirados en 1985 por los poderosos sobrealimentados.
Los motores turbo seguían cobrando protagonismo, sumándose a la moda de la escudería Williams con mecánica Honda. Mclaren esa temporada apostó fuerte por un motor V6 turbo desconocido en el circo, el Tag-Porsche. Acertaron de pleno en la elección, y el motor se acopló al chasis como un guante.
Neumáticos: Se usaban neumáticos slicks para seco y rayados en caso de lluvia. Los proveedores de neumáticos eran Michelin (Mclaren-Porsche TAG, Brabham-BMW) Goodyear (Ferrari, Williams-Honda) y la menos competitiva Pirelli (Toleman-Hart).
Chasís: Mclaren fabrico el primer chasis en fibra de carbono, que junto al motor Porsche se hicieron invencibles en la temporada.
Puntos: Se repartían de la siguiente manera: 9, 6, 4, 3, 2, y 1.
Repostaje: La reciente estrategia de entrar a mitad de carrera para repostar quedaba suprimida en 1984 por el peligro que esto suponía. Desde el punto de vista normativo, la gran noticia era la limitación del consumo, o más bien la cantidad de combustible del que se disponía para la carrera. El límite de 220 litros es determinante y en muchos casos los monoplazas se quedarán sin combustible antes de que finalicen la prueba o se verán obligados a disminuir el consumo para llegar al final.
La limitación del consumo hizo proliferar las trampas y trucos para evitar que los abandonos por falta de gasolina, cuyos repostajes fueron prohibidos de nuevo en aras de la seguridad. Gasolina mas densificada con productos químicos y enfriada para aumentar la capacidad de los depósitos estaban a la orden del dia. Pero la artimaña mas sonada se descubrió en Tyrrell al final de temporada: Hacían reponer agua (esto no estaba prohibido) en las últimas vueltas de la carrera, con bolas de plomo o productos derivados del petroleo de alta densidad para dar el peso mínimo en la balanza una vez concluida la prueba. Los trece puntos obtenidos para la escudería por sus pilotos fueron anulados, quedando Ken Tyrrell en vergonzosa evidencia
